Los fabricantes de dispositivos médicos integran constantemente nuevos modelos de IA en sus productos y, a menudo, requieren la ayuda de socios de desarrollo, como hospitales y sistemas de atención médica.
Mientras Conferencia de tecnología médica de Reuters En Boston, un panel de tres líderes en tecnología médica discutió cómo trabajan con estos socios clínicos para desarrollar y perfeccionar sus tecnologías. A partir de esta colaboración, también destacaron tres conceptos erróneos comunes que, según dicen, los líderes hospitalarios suelen tener sobre la IA.
La IA se hará cargo del proceso
Algunos ejecutivos de atención médica parecen preocupados de que los algoritmos puedan convertirse en una parte más importante del proceso de atención que el juicio y la experiencia humanos, señaló LaMont Bryant, vicepresidente de asuntos gubernamentales globales y acceso al mercado de Stryker.
Sin embargo, enfatizó que ese no es el caso.
“La IA no está ahí para hacerse cargo del proceso, pero es otra herramienta que puede ayudar (a los médicos) a tomar una decisión basada en mejores datos y mejor información”, explicó Bryant.
Las compañías de dispositivos médicos entienden que los médicos y enfermeras saben qué es lo mejor para sus pacientes, señaló, y afirmó que Stryker vende herramientas para mejorar su toma de decisiones clínicas, nunca para reemplazarlas. Estas herramientas están diseñadas para ayudar a los médicos a desempeñarse al más alto nivel y experimentar menos agotamiento por las tareas administrativas y los procesos manuales.
Las empresas tecnológicas solo quieren tus datos
“Es común que los líderes hospitalarios asuman que las empresas de tecnología y las nuevas empresas de inteligencia artificial simplemente quieren comprar sus datos”, dijo Nick Wilson, vicepresidente de producto y marketing de Philips.
“Cada discusión de la alta dirección en la que participo inevitablemente toma la forma de: ‘Tenemos una base de datos enorme. ¿Qué podemos hacer? ¿Cómo podemos vendérsela?’ Básicamente, lo cual creo que puede ser útil en circunstancias muy concretas. Pero monetizar los datos no es suficiente si no somos capaces de convertirlos en conocimientos y luego transformarlos en cambios y acciones reales, y de ahí viene el verdadero trabajo duro, no de obtener los datos sin procesar”, explicó.
Los desarrolladores de tecnología normalmente no solo quieren comprar datos hospitalarios y luego trabajar con ellos ellos mismos, sino que buscan socios que puedan ayudarlos a descubrir cómo convertir esos datos en conocimientos útiles que puedan conducir a mejores decisiones y resultados clínicos, explicó Wilson.
Los flujos de trabajo clínicos están completamente automatizados
La IA no automatiza completamente las tareas clínicas, y la mayoría de los desarrolladores de tecnología sanitaria no tienen planes de desarrollar herramientas para hacerlo en el corto plazo, enfatizó Amir Tahmasebi, jefe de infraestructura y algoritmos de IA en Becton Dickinson.
“La IA está destinada a aumentarlo todo, no a automatizarlo”, señaló.
La IA también puede hacer que la atención sea más segura, añadió Tahmasebi. Por ejemplo, los gemelos digitales (réplicas virtuales de pacientes) permiten a los equipos de atención realizar un seguimiento del rendimiento de un dispositivo e identificar patrones que indican problemas. Esto permite intervenciones proactivas para evitar que los pacientes tengan que acudir a la sala de urgencias, explicó.
En resumen, los fabricantes de dispositivos médicos quieren dejar claro que la IA no está aquí para reemplazar a los médicos o enfermeras, sino para ayudarlos a tomar mejores decisiones, prevenir eventos adversos y mejorar la atención al paciente.
            


















