Por LISA MASCARO
WASHINGTON (AP) — El Pentágono sabía que había sobrevivientes después de un ataque a un presunto barco narcotraficante en el Mar Caribe en septiembre, y el ejército estadounidense llevó a cabo un ataque de seguimiento de todos modos, según dos personas familiarizadas con el asunto.
El motivo del segundo ataque fue la necesidad de hundir el barco, según personas familiarizadas con el asunto, que hablaron bajo condición de anonimato porque no estaban autorizadas a hablar del tema públicamente. La administración Trump dice que las 11 personas a bordo murieron.
Aún no está claro quién ordenó los ataques y si el ministro de Defensa, Pete Hegseth, estuvo involucrado, dijo uno de los encuestados. Esto será parte de una reunión informativa secreta del Congreso el jueves con el comandante que, según la administración Trump, ordenó el segundo ataque, el almirante Frank “Mitch” Bradley.
Hegseth defendió el segundo ataque como en la “niebla de guerra” y dijo que no vio supervivientes pero que tampoco “se quedó” durante el resto de la misión.
Hegseth está bajo un creciente escrutinio debido a los ataques militares contra presuntos narcotraficantes en el Caribe y el Pacífico Oriental. Expertos jurídicos y algunos legisladores dicen que un ataque que matara a sobrevivientes habría violado las leyes del conflicto armado.
















